Es una sensación curiosa empezar algo o empezar en algo. Un nuevo trabajo, por ejemplo, es siempre una fuente de incógnitas. Hay un experimento interesante cuando se empieza algo: recordar la primera sensación que te llevaste de las personas. Después, cuando han pasado unos meses y hay confianza les puedes decir: -Tu me pareciste un cretino o – por ejemplo, -Pensé que llevabas peluquín. Es muy gracioso. Empezar siempre resulta bonito porque hay ilusión, ingenuidad, pretensiones y buenos deseos. En cierto sentido, podemos decir que siempre estamos empezando. ¿Por qué no? El que se olvida de empezar algo, el que nunca empieza nada tiene un problema. Ha perdido la ilusión. Ilusión es lo que a nosotros nos sobra, aquí en la General Televisión. |
martes, 17 de abril de 2007
Programa 37: "Empezar"
Publicado por Admin en martes, abril 17, 2007
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