Cuando eres pequeño y vas a los columpios, al principio no te sabes dar –se dice así- y necesitas que los mayores te den un pequeño empujón para que el columpio se mueva. Después, con la práctica y el tiempo aprendes a darte solo. Pasa el tiempo y nos hacemos mayores. Trabajamos y buscamos la felicidad en el dinero, los coches, los viajes, la comida y las casas en la playa. Entonces nos ocurre lo mismo que en los columpios cuando éramos pequeños. Los que tenemos cerca nos necesitan. La familia nos pide atención. Nuestros amigos también. Nos piden que nos demos a ellos y nosotros, como cuando éramos pequeños en los columpios, no nos sabemos dar. |
miércoles, 12 de septiembre de 2007
Programa 118: "Saber darse"
Publicado por Admin en miércoles, septiembre 12, 2007
Etiquetas: reflexion
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1 comentarios:
Nada, tu mail me rechaza de manera sistemática...
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